lunes, 31 de octubre de 2011

Mucha, creador del art nouveau



Alphonse Maria Mucha  (1860-1939) suele ser recordado por el papel destacado que desempeñó en la configuración de la estética del Art Nouveau  francés en el cambio de siglo. Como un artista emprendedor relativamente desconocido de origen checo que viviera en París, Mucha alcanzó la fama inmediata cuando, en diciembre de 1894, aceptó una comisión para crear un cartel para una de las más grandes actrices de entonces: Sarah Bernhardt. No obstante las grandes preocupaciones del impresor para presentar el trabajo final, el estilo poco convencional e innovador de Mucha le encantó a la diva, lo mismo que al público. Se impuso el 'estilo Mucha', como fue conocido el Art Nouveau  en sus primeros días, efectivamente éste había nacido. El éxito de ese primer cartel trajo un contrato de 6 años entre la Bernhardt y Mucha y a partir de entonces su trabajo para ella y demás clientes incluyó trajes, vestuario, escenografías y decorados, diseños para revistas y portadas de libros, joyas y muebles y numerosos carteles.



Una interesante etapa de la creación artística de Mucha fueron sus diseños para la serie de alhajas realizadas por el joyero parisino Georges Fouquet, a quien le llamaron la atención los adornos con los que Mucha engalanaba a las mujeres de sus carteles y paneles, reproducidos con gran lujo de detalles, también por sus propiedades materiales. Fouquet presentó una colección de joyas realizadas sobre diseños de Mucha en la Exposición Universal de París de 1900, en la que prevalecían reminiscencias orientales y bizantinas. Además, diseñó los interiores de la Joyería de Fouquet.

Mucha fue iniciado en la Gran Logia Masónica de París en 1898, y alcanzó el grado supremo de gran maestro de la Logia de Checoslovaquia. Nunca concibió su obra desde la frivolidad, sino desde un espíritu de servicio visionario. A pesar de su carácter publicitario y decorativo, las creaciones de Mucha aspiran a la trascendencia. Amigo de Paul Gauguin, Johan August Strindberg y del grupo de artistas asociados a la revista La Plume, que se interesaban por las ciencias ocultas, Mucha utilizó en sus obras metáforas enigmáticas y signos esotéricos. Su relación con la masonería responde a este carácter idealista y visionario. Mucha también es autor de un libro, Le Pater (1899), en el que ilustró el padrenuestro con una simbología hermética. El misterio que destilan las obras en las que evoca el ciclo de la vida tiene también un sentido religioso.
Mucha volvió a Checoslovaquia en 1910, donde dedicó el resto de su vida a la producción de una de una serie épica de 20 enormes pinturas que representan la historia de los pueblos eslavos, la Epopeya eslava.





1860 Nace en Ivančice al sur de Moravia el 24 de julio.


1879 Se marcha a Viena para trabajar como pintor de escenografias teatrales.


1883 Es invitado por el conde Khuen-Belassi para decorar su Castillo en Emmahof, Austria.


1885 Inicia sus estudios en la Academia de Artes de Munich, patrocinado por el conde Khuen-Belassi.

1887 Se traslada a Paris para estudiar en la Academie Julian.


1892 Traba amistad con Paul Guaguin.

1892 Fue comisionado para ilustrar el libro "Scenes et episodes de l'histoire d'Allemagne" de Charles Seignobos.


1894 Elabora su primer poster para Sarah Bernhardt, Gismonda, una obra de Victor Sardou. Tal es su exito que la Divina Sarahlo contrata por el termino de seis anos.


1896 Mucha elabora los paneles decorativos Las cuatro estaciones.
1897 En febrero realiza su primera exposicion individual en la Galeria Bodiniere de Paris, exhibiendo 107 obras, seguida en mayo para el Salon des Cent's en el que muestra 448 obras.


1898 Se convierte en aprendiz de la logia Masonica de Paris. Viaja a Espana. 
 
1899 Es comisionado por el gobierno Austro-Hungaro para diseñar el pabellon en la Exposicion Universal de Paris de 1900.

1900 Empieza a trabajar en disenos de joyeria para el famoso joyero Georges Fouquet, asi como en el diseno de su casa matriz de Paris.  
1902 Publica Documents Decoratifs, un libro de bolsillo para artesanos.


1903 En octubre, conoce a la estudiante de arte checa Maruska Chitilova, futura esposa.
   

1905 Publica el libro Figures Decoratives.
1906 Se muda a los EE UU donde da clases y pinta muchos retratos en oleo sobre tela.

1908 Pinta los murales para el nuevo edificio del German Theatre de Nueva York.

1909 Nace su hija Jaroslava.


1910 Se traslada con su familia al castillo de Zbiroh, en Bohemia, e inicia su gran obra epica eslava.

1911 Concluye los murales en el Palacio del Ayuntamiento de Praga, la mas grande decoracion interior en el estilo Art Nouveau en la ciudad.


1918 Al crearse en estado independiente de Checoslovaquia, Mucha es designado para disenar las estampillas postales y los billetes de banco.

1921 Realiza una exposicion muy exitosa en el Brooklyn Museum, New York.

1928 Concluye el ciclo epica eslava, que es presentado oficialmente al pueblo checo y a la ciudad de Praga.  

1931 Es comisionado para disenar un vitral en la catedral de San Vito de Praga.

1939 Mucha es uno de los primeros checos arrestados por la Gestapo recien los alemanes invadieron su pais. Luego regresa a su casa con la salud muy menguada. El 14 de Julio muere en Praga y es enterrado en el cementerio de Vyšehrad.




Digilicious.cl Blog de diseno. Diciembre, 2007



Alfons Mucha es bien conocido tanto en el mundo de las artes aplicadas como libres, un ilustrador de gran renombre e influencia tanto en su época como lo es ahora. Más de un siglo después de su apogeo, su obra sigue siendo uno de los principales referentes al que muchísimos de nuestros ilustradores contemporáneos recurren una y otra vez para rescatar el encanto y belleza particular de sus composiciones e ideales femeninos. Actualmente, su influencia se hace notar tanto en el mundo del diseño como en el de la ilustración, las historietas y el arte ornamental.

De origen Moravo, en 1888 Mucha se traslada a París, donde obtuvo el gran éxito y reconocimiento que se extiende hasta el día de hoy. Ahí ejecutó la obra decisiva que daría inicio a su estilo y por el cual nos resulta familiar; se trata del afiche para la obra de teatro Gismonda de Victorien Sardou (1895), en el cual se haya representada la figura de la popular actriz Sarah Bernhardt, quien junto al propio Théâtre de la Renaissance ocuparía un lugar privilegiado gracias a la mediación de un contrato de exclusividad pactado entre ambos artistas y que tuvo una duración de 6 años. Para las obras del Théâtre de la Reanaissance Mucha no sólo realizó los carteles sino también el diseño del vestuario y las escenografías.

Para este entonces, Mucha es, ante todo, un artista del Art Nouveau , Un artista completo que no sólo brilla como dibujante, sino también en la pintura, la escultura, el diseño de joyas y el diseño aplicado a la industria, a la gráfica y a la decoración. En todas estas áreas, su trabajo se ha caracterizado por la gran abundancia de elementos ornamentales, así como por la presencia idealizada de la joven muchacha, retrato estilizado del ideal de belleza de la época; rodeada de flores, arabescos y otros adornos, a menudo inscrita en la composición vertical característica del afiche de Alfons Mucha; ese cartel de 2 metros de alto, con figuras a escala casi natural y las características inscripciones en los márgenes superior e inferior. Mucha es ante todo, un artista del Art Nouveau , y el Art Nouveau  es, de alguna manera, Alfons Mucha.

Brazalete en forma de serpiente diseñado
para Sarah Bernhardt.
Los atavíos y ornamentos en su obra aluden, ciertamente al neogótico y en gran medida al arte sacro secular, aunque también es posible detectar las influencias del arte asiático, especialmente del Ukiyo-e (arte del grabado en madera japonés del que muy probablemente sea oportuna hablar en un futuro próximo) el cual a fines del siglo XIX contaba con una alta aprobación por parte de los artistas europeos. No obstante lo anterior, nada influenció el trabajo de Alfonse Mucha de manera tan dramática como la obra de los artistas simbolistas, con quienes mantuvo contacto durante su estadía en París y de donde muy seguramente importó la abundancia de flores en la composición, el aire nostálgico y la imagen de la doncella hermosa, a medio camino entre la mujer fatal y la virginal princesa.

Alfons Mucha, cuya obra alcanzó una gran difusión gracias a los grandes tirajes y su ulterior distribución, logró que el arte penetrase en la vida cotidiana de las personas comunes tal como correspondía al ideal artístico de la época. Su principal aporte al mundo de la comunicación visual reside precisamente ahí, pues rescató el arte útil del segundo plano que llevaba en relación al arte libre y sometió su trabajo, aquel con fines mediáticos, prácticos, comunicacionales, al mismo rigor, estándar de calidad y perfección de su pintura.

A quienes les interese consultar alguna bibliografía sobre este eximio artista (uno de mis grandes favoritos), la mayor parte de la información aquí presentada fue extraída del libro “Alfons Mucha, Artista de Art Nouveau ”. Editorial Taschen, 1994.

Sitio recomendado: Mucha Museum
Tomado del blog Encuentros con el arte
miércoles 9 de marzo de 2011


Alfons Mucha es sin duda un referente cuando miramos hacia el Art Nouveau  (entrada anterior de este Blog) Dibujante, cartelista, decorador, diseñador y pintor, Mucha nació en 1860 en una pequeña ciudad de Moravia, Imperio Austriaco (actual República Checa) muy cercana a Brno.

Desde niño tuvo inclinación por el dibujo y pronto pudo trabajar en Moravia en empleos que requerían una pintura decorativa. Estuvo en Viena realizando trabajos para una compañía de diseños decorativos de teatro y completó una formación que pronto pondría en práctica al regresar a Moravia y comenzar a trabajar por su cuenta realizando decorados y retratos.

El conde Kart Khuen, después de un encargo de unos murales para uno de sus castillos quedó tan satisfecho que le apadrinó para que entrase a formarse en la Academia de Bellas Artes de Munich.

La famosa Academia Julián parisina fue otro de los lugares en donde el artista se formaría. Ya por esa época, en París, realizaba ilustraciones para revistas y hacía trabajos publicitarios.

Un trabajo para la actriz Sara Bernhardt, a la que iba a estar muy unido, le lanzaría a la fama. Se trataba del cartel anunciador de la obra Gismonda que apareció en las paredes parisinas y que fue una auténtica revolución.

Bernhardt le ofreció un contrato para seis años. Sus carteles, en los que aparecía la actriz, llevaron la fama de ésta por toda Europa y Alfons Mucha realizaría además trabajos de escenografía y vestuario en el Théâtre de la Renaissance. Fue el principio del triunfo.


Verano
Sus diseños presentan unas líneas sinuosas, numerosos arabescos, flores de largos tallos y mujeres con larga melena y ataviadas con túnicas de muchos pliegues. Mucha produjo gran cantidad de pinturas, pósteres, ilustraciones, diseños para joyería, alfombras, empapelados y decorados teatrales con un estilo, como podemos observar, muy en la línea del Art Nouveau  que fue muy imitado, aunque el intentaba distanciarse de esa denominación. Su opinión era que el arte debía de transmitir un mensaje y se sentía profundamente frustrado por la fama que consiguió de un arte que era más bien comercial.


Estos diseños con los que Mucha adornaba a las mujeres y que reproducían todo tipo de detalles, llamaron la atención del joyero Georges Fouquet que realizaría una colección de joyas basada en ellos y que presentaría en la Exposición de París de 1900. Fue una colección en la que prevalecía la influencia bizantina y oriental. También decoró la Joyería de Fouquet. Alfons Mucha visitaría en numerosas ocasiones Estados Unidos.

En su obra pictórica podemos apreciar dos estilos: uno, de influencia prerrafaelista (este blog 7 de enero 2011) y otro, el que aparece en sus carteles, que como ya hemos mencionado era marcadamente Art Nouveau . No obstante, tanto en uno como en otro, aparecen las mujeres ataviadas como diosas y con abundantes adornos, con caras angelicales, siempre rodeadas de motivos florales y alegres. Se podría decir que creó “una mujer Mucha”.

Realizó diversas “series” denominadas de diferente manera como: “Las 4 estaciones”, o la serie de “Las Joyas”, o “Las Horas del Día”, etc.

Primavera
"Las cuatro estaciones", que fueron empleadas como paneles para decoración, fue una de sus obras más conocidas. Podemos apreciar con claridad los cambios de las estaciones, la diferencia de tonalidad, los distintos momentos del campo en cada época y todo ello con sus diseños característicos, tanto en lo referente a la naturaleza como a la figura de la mujer. Mujeres bellas, con ropa etérea, rodeadas de una naturaleza que ayuda a equilibrar la composición, todo minuciosamente representado.

No podía faltar en su obra la vidriera. La que vemos aquí se encuentra en la Catedral de San Vito de Praga.


Gran cantidad de obra que creó para calendarios todavía hoy en día la podemos admirar decorando cajas, carteles y sobre diferentes soportes.

Épica eslava
Alfons Mucha dedicaría muchos años de su vida a lo que el consideró su obra maestra: La epopeya del pueblo eslavo. Se trataba de unos veinte cuadros de gran formato que más tarde iba a presentar en Praga. Mucha había soñado con completar esta serie, la épica eslava, desde su juventud. Las pinturas, que describen la historia de los pueblos eslavos, serían donadas a la ciudad de Praga en 1928.

Cuando los alemanes invadieron la antigua Checoslovaquia, Mucha fue arrestado. Nunca pudo recuperarse de esos momentos, ni superar ver su país invadido. Moriría en Praga en 1939.
El Museo Mucha, primer museo del mundo consagrado vida y obra de Alfons Mucha, está situado en el palacio de estilo barroco Kaunic, en el centro histórico de Praga.

Fuentes consultadas:
El simbolismo. Michale Gibson (Edit. Taschen)
19th-century art.de la Nacional Gallery de Praga
Historia visual del Arte. Claude Frontisi. (Edit.Larousse)
La red en Wikipedia.








Interior de la Joyería Fouquets diseñado por Mucha









Salambó



Portada de la revista Au Quartier Latin









De la serie Épica Eslava





Nota: Para apreciar mejor las imagenes haz click sobre ellas.







domingo, 30 de octubre de 2011

Fotografía y deporte


Hoy domingo concluyen los XVI Juegos Panamericanos Guadalajara 2011, cuya celebración ha redundado en un gran éxito para los organizadores y delegaciones participantes de nuestro Continente, así como para la ciudad de Guadalajara y sus habitantes y, desde luego, para México como país anfitrión que de tal manera ha sabido exhibir su verdadero rostro como nación que anhela y desea la paz, demostrar lo que es capaz un pueblo mayoritariamente pacífico, bondadoso, trabajador y triunfador también. Las medallas logradas y la magnífica organización de los Juegos así lo confirman.


Aunque este blog es esencialmente cultural y artístico, dedicamos este post a la fotografía deportiva que no desmerece en nada por sus cualidades estéticas y logros técnicos, en ocasión de tan estupendos Juegos.